miércoles, mayo 04, 2005

para ti... otra vez.

Estoy buscando melodía
Para tener como llamarte[...]
...corazón en fuga
herido de dudas de amor...
-quien fuera- Silvio Rodríguez
Me gustaría decirte un cuento, una historia que te agrade y mantenga tu atención en mi. Regalarte un caramelo suave a tu paladar y endulce tu corazón. Quiero cantarte una canción, bailar para ti, actuar una obra que encante el bello fulgor de tu mirada... algo que rompa este glaciar espacio que nos separa; solo quiero tocar tu corazón, saber que eres, tu libro favorito, la música que te gusta, que piensas de la vida...

¿te gusta la ecología? ¿quieres helado de chicle? ¿Te gusta conducir por la noche? ¿Que es lo que mas te gusta del paisaje? ¿Has oído dormir a la montaña? ¿Me puedes cantar una canción?... ¿por favor?

Quiero descubrir poco a poco tus contrastes, pintar de colores este pequeño placer por conocerte, esta sabrosa incertidumbre que le da un sentido mas real a la esencia de habitar pensando en alguien que no piensa en ti, de esta búsqueda de la estrategia sin táctica, de esta pasión tan febril igual de adolescente que las ganas por abrazar la libertad del viento, por sentirte y por liberarte, por pensarte en vuelo, por beberte en el incierto...

Aun no puedo definir como te encuentro, no se en realidad si es que acaso soñaremos juntos, si acaso te atreverías a mirarme una sola vez con amor y con deseo. No lo se, pero me encanta la magia que has despertado de nuevo en este momento, sin la frivolidad de los ajenos a lo perdido, en el himno de la suave hermandad de la distancia: Bendita seas.

martes, mayo 03, 2005

Sin palabras...

Me gustas cuando callas porque estas como ausente,
y me oyes desde lejos y mi voz no te toca
parece que los ojos se te hubieran volado
y un beso te cerrara la boca
PABLO NERUDA
-20 Poemas de amor y una canción desesperada-
Para: Flor.


Eres muy callada, y dices las cosas en tus ojos.
Vives en mi como me cuenta tu mirada,
sabes entablar una charla silenciosa
si me vistes cuando hablaba
solo imaginaba tu mirada.
Miles de sueños tuve
creando universos paralelos
platicando mis hazañas, mis anhelos...
tu sonriendo, no dijiste nada, besaste mi silencios
con tristeza, como siempre, me llevaste en tu mirada.

para ti mujer... para ti.

No te vayas de mi, por favor.


Eres como la brisa matinal de agosto, hueles a hierba fresca, a café recién cortado, a humedad quebrada, a campo; tan tersa es tu piel como la niebla densa de una noche de noviembre sobre Coatepec. Cuan fantástico es imaginarme caminando a tu lado en la fresca tarde de mayo por el cafetal, descalzos en la hojarasca seca de chalahuite, sorbiendo a ratos el canto sublime del jilguero, dando gracias del amor...
Dame tu mano, corramos a través del campo, mirando las cristalinas aguas de la bola de oro, sintamos el devenir del tiempo en los vados imprescindibles donde juguetean las aguas huidizas, la palabra y la poesía; sigamos caminando por este pequeño pedazo de vida y amor, que compartiremos con la humanidad sin dejar por dichosa la beldad de la inocencia, la sangre, la vida y la correspondencia de nuestro ser.